Misión de Robo.

Off-rol::

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¿Por  qué no lo había visto venir?

Los tres chocamos entre nosotros,  el humanoide desapareciendo en humo y siendo traspazado. Recibí un ataque directo del gato en el abdomen, al tiempo que mi ataque, tanto Miktlayotl, como mis ataques físicos, chocaron en el gato, dañando gravemente su costado y cuerpo. Gruñí molesto, al tiempo que el efecto de Kokoli desaparecía y sentí mis piernas inmovilizadas por el veneno de las espadas.

Caí de bruces al suelo, sólo pude detener el daño, usando el báculo, clavarlo al suelo y deslizándome con el hasta al suelo. En el trayecto de caí da, alcance al de la cara blanca y lo ayudé a sujetarse. Sabía que Miktlayotl no me dañaría a mí, así que lo cubrí con mi cuerpo en lo que las nubes se desvanecieron.

Me levanté, al tiempo que el gato invocaba de nuevo aquella sombra verde y atacó al monstruo. Noté la dirección de su ataque, su intención era robar el anillo al tiempo que atacaba con las espadas a las extremidades. El monstruo no sería tonto, así que le daría una oportunidad de ataque al gato. Me enderecé y apunté con el hocico. Invoqué toda la ira y enojo en mi cuerpo y concerté una enorme bola de fuego en el hocico y disparé

-¡TLAPIPITSA! –rugí, una bola de fuego se dirigía con toda mi ira acumulada en ése único ataque.

Puedes::

No puedes::

El miembro 'Anmorph Crystol' ha efectuado la acción siguiente: Lanzador de Dados.

'Puedes/No Puedes' :

Nuestros movimientos, el de los animales y el mio, habían sido coordinados pero, para nuestra desgracia, este bastardo tenía una jugada bien guardada.
Al tenernos cerca de él, se desvaneció luego utilizar la habilidad de uno de sus anillos.
-Desgraciado.- exprese al caer sobre mis piernas luego de que la espada que portaba el gato con alas me rebanara mi parte media y me imposibilitara la movilización de mis piernas por el veneno que estas poseían -Con que estas nos traémos.- dije mientras erguía mi tronco sobre mis piernas inertes, en el suelo.
Observé como la sangre que escurría por el surco de mi abdomen, aquel que no era tan profundo como para dejar ver mis organos, escurría sangre limpia. Pase mi dedo por aquel surco para acumular mi sangre y me la lleve a la boca.
-Esto se esta poniendo interesante...- mencione mientras una desquiciada sonrisa se dibujaba en mi rostro al momento que llevaba esos dedos a mi boca -The Wind.- grite mientras colocaba la carta sobre mi cuerpo para invocar allí la ráfaga de viento que me elevó a una gran altura a una gran velocidad.
Desde esa altura vi que el gato con alas se abalanzó sobre el guerrero dorado y, desde mi interior, el odio incodicional que surgió en mi interior me impulsó a arrojarle las cartas navajas, que tenía en mi mano, hacía aquel individuo.
Las cartas, tomaban velocidad centímetro a centímetro gracias a su forma aerodinámica y rigidez, que, sumada a la aceleración que ganarían gracias a la gravedad de la tierra, las hacían potentes proyectiles.
Dichos proyectiles, tenían como objetivo el cuello de aquel ser. Una para el costado derecho, otra para el costado izquierdo.

Jourgios vio como el felino alado se dirigió hacia él a toda marcha, empuñando ambas espadas cubiertas de aquella sustancia negra. Se enfocó tanto en él que, al darse cuenta, tenía una bola de "fuego", la cual le impacto al costado de la cabeza. Si bien, pudo ladear la cabeza y cerrar los ojos, sentía molestia al abrirlos y enfocó su atención en sus demás sentidos.
Escuchó como el animal sanjaba el aire al aproximarse a él. Aferró su agarre a los mazos y se enfocó en repeler las espadas, las cuales las escucho zumbar cerca de sus extremidades.
Jourgios se concentro tanto en estos ataques provenientes del felino, que se percato tardíamente que algo más se dirigía hacia él. No supo determinar su tamaño por lo que el evitarlos le fue imposible.
El cuello de Jourgios comenzó a sentirse cálido y húmedo, en el momento en el que dos filosos objetos se le hundieron en la carne de los costados de su cuello. Un ruido a cadena resbalando por el metal se dejó oír antes de que el ruido sordo de unos objetos impactando en el suelo concluyeran todo.
Jourgios, sorprendido y confundido, giro sobre sí para apartar lo que tuviera cerca y poder recuperar lo que se le había caído.
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Off Rol:
Zafeti, por favor luego coloca las imágenes de los colgantes

Había funcionado, y no sólo eso, el de cara de blanco le había lanzado dos cartas, pudiendo cortar finalmente su cuello y, al mismo tiempo, un par de collares que tenía colocadas. Por mi parte, sentía de nuevo cómo mis piernas volvían a moverse, por lo que analicé un poco la situación.

El gigante estaba aturdido aún, por lo que atacarlo era aún viable. Al mismo tiempo, mientras no pudiésemos quitarle el anillo, sería prácticamente imposible derrotarlo. Fue entonces que se me ocurrió una idea.

-Oye, cara blanca –grité al segundo humano.- Invoca de nuevo ése viento suyo y ése gas.- dije, mientras con señas le indicaba justo a los pies del enemigo. luego le avisé al gato, haciéndole señas a los collares y tratando de decirle que en cuanto el veneno le hubiese pegado al gigante, lo empujase y le arrebatara lo demás. Invoqué otra bocanada de fuego y alcé la mano en puño. Luego subí un dedo, un segundo y, al alzar el tercer dedo, lancé una llamarada nueva contra el rostro del humano, esperando el payaso y el gato se coordinaran para que el viento paralizara al gigante y el gato le fuera fácil acabar con él.
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Tlapipitsa: Técnica de oscura que le permite utilizar la Ira y la venganza para crear una especie de fuego de color negro a través de sus fauces. Es capaz de quemar al oponente.
COSTO: 20

Mire con desagrado a aquel ser peludo. Había escuchado de sus propias fauses que sus pensamientos y sentimientos con respecto a los demás era igual que aquel bastardo dorado, así que decidí ignorar lo que me grito, además de que me encontraba a 15 metros de altura y los ruidos de batalla me dificultaron escuchar bien que me había dicho.
Mire con odio a aquel a quien estaba depositando mi furia, aquel miserable de armadura dorada, no podía consentir que estuviera respirando, así que me moví en el aire, para colocar la parte superior de mi cuerpo hacía abajo y me dirigí a toda velocidad sobre aquel sujeto. Al estar a pocos metros de él, gire sobre mi eje, para poner mis incontrolables piernas antes que mi cuerpo entero, de esta manera, si sufría alguna lesión no lo sentiría de momento.

puedes:

no puedes:

El miembro 'TheClown' ha efectuado la acción siguiente: Lanzador de Dados.

'Puedes/No Puedes' :

Off Rol:
Veo que ya es tarde, pero de igual manera coloco las imágenes de los pendientes.

Off Rol:
Buena jugada.
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On Rol:
Jourgios estaba sorprendido por el rápido accionar que tuvo aquel ser que fue el último en ingresar en la batalla. Su rostro le parecía conocido, lo había visto en el pasado. En un cartel de "se busca", pero, era de baja importancia y nunca hubiera pensado que le sería tan problemático.
Jourgios:-Y pensar que llegaste y pudiste conectar tres ataques directos contra mi. Te aplaudiría, si pudiera mover mis brazos.- dijo irónicamente Jourgios mientras una esfera se expandía desde su centro, quitando así de él el veneno lanzado a quemarropa y al invocador que estaba acuchillandolo :-Y pensar que tenga que usar mi Brazalete de la Defensa Única...- menciono mientras ambos collares que habían sido apartados de él, comenzaban a levitar junto a él :-Espero volver a encontraros y que cuando eso pase, sea mi verdadero cuerpo y no este clon el que los enfrente.- susurraba mientras su cuerpo comenzaba a marchitarse a medida que la armadura comenzaba a separarse de su cuerpo, para así, dejar ver, el viejo cuerpo de un ser grisacio, casi sin vida:-No es conveniente que tomen la joya. Si lo hacéis, todos los magos de Fiore los perseguiréis.- mencionó antes de cerrar finalmente sus ojos justo cuando todas sus pertenencias, rodeadas por la esfera de la Defensa Única, se apartara a gran velocidad para perderse en los cielos.
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Off Rol:
Brazalete de la Defensa Único: Antiguo Brazalete que permite proteger al usuario de cualquier efecto o daño.

Todo había acabado, al final, el de cara blanca hizo lo que quiso. Mi participación, a pesar de ser el más aguerrido había servido para nada. Mis piernas se recobraron, pudiéndome al final levantarme y caminar hasta dejar la katana dorada en su lugar, al final, no era mía. Nadie me veía, el gato y el cara blanca estaban celebrando. Gruñí para mis adentros y caminé a la salida antes de que ellos me pudiesen ver.

Al parecer, mi poder era inútil nuevamente, y así, jamás alcanzaría mi objetivo.

Mientras las ruinas de aquel lugar comenzaba a formar y alojar más sombras, una risa dejo escucharse, retumbando en cada recoveco del lugar. Mi sonrisa iba en aumento y con un tono burlón. Las sombras comenzaban a moverse a medida que las risas se hacían más fuertes, propagándose por todo el lugar.
Vaya, vaya... Si que sois fuertes. Pudieron con él dije mientras mi figura dejaba verse emergiendo en varios lugares Eso que no parecéis tan fuertes como él si aparentaba dije antes de comenzar a reír como un desquiciado Necesito gente de vuestro... Calibre, ¿Que dicen? Yo puedo hacerlos más fuertes, mucho más de lo que se pueden imaginar, una prueba soy yo dije antes de soltar una risa de confianza.
Luego, un gran temblor hizo temblar la tierra y las sombras se expandieron cual liquido en el piso mientras mis figuras, todas negras, se sumergían en aquella sustancia.

Había vencido, había derrotado a ese bastardo que tanto odio me despertaba. Un sonrisa desencajada se formo en mi cara y a continuación comencé a lamer la sangre que poseían las cartas mientras veía como el cuerpo de aquel sujeto caía marchito frente a mi.
Traté de levantarme y en el primer intento, lo único que logre fue caerme hacía delante, cerca de aquel cuerpo muerto. Sonreí y comencé a golpearlo fuertemente en las costillas, mientras cada golpe dejaba sonar un ruido crujiente, más se ensanchaba mi sonrisa y más se habrían mis ojos.
Después de dejar aquel tordo realmente amorfo, intenté levantarme nuevamente, con dificultad logré permanecer erguido.
De repente, una voz comenzó a escucharse y mientras buscaba a su autor, pude ver que el animal de pelaje oscuro estaba lejos, se había alejado bastante.
-Oh, con que hay otro obstáculo en mi camino ¿eh?- dije mientras trataba de ponerme en posición de batalla, en eso, una sombra se comenzó a parar enfrente mio, tomando la figura oscura pero, le pertenecía a un hombre fornido -¿Que quieres?- dije antes de escuchar lo que dijo -¿Y como piensas que podrás hacer eso? ¿Alegando que solo puedes hacerlo? Te recomiendo que no trates de rebajarnos porque, herido como estoy, te cortaré la garganta.- le grite a la sombra mientras le lanzaba un débil golpe al pecho, el cual, obviamente traspaso al sujeto sin herirlo

El olor a muerte había vuelto y me giré, varias sombras se habían adueñado del lugar y noté al payaso y al gato en problemas. Unas figuras tomaron forma y me asquee al sentir tan fuerte el poder de las tinieblas. Estaba lo suficientemente lejos para no ser notado, así que me agazapé a la pared y presté atención.

Las sombras hablaron a los dos y dijeron:

-Vaya, vaya... Si que sois fuertes. Pudieron con él Eso que no parecéis tan fuertes como él si aparentaba dije antes de comenzar a reír como un desquiciado Necesito gente de vuestro... Calibre, ¿Que dicen? Yo puedo hacerlos más fuertes, mucho más de lo que se pueden imaginar, una prueba soy yo.

Me sentí molesto, una vil y vulgar sombra tratando de hacerse más fuerte, era imperdonable. Saqué mi báculo de nuevo, sólo para sostenerme y me acerqué, usando mis almohadillas de mis patas para no hacer ruido.

Luego escuché al de cara blanca hablar.

-¿Y como piensas que podrás hacer eso? ¿Alegando que solo puedes hacerlo? Te recomiendo que no trates de rebajarnos porque, herido como estoy, te cortaré la garganta.

En medio de la Oscuridad, camuflado con mi pelaje, preparé mi muramasa en caso de que tuviera que pelear de nuevo, aún algo herido por la batalla anterior, pero creo que aún podía resisitir.

Sin estar con ellos, podía observar como querían descubrir mi posición. Uno de ellos, uno de bello corporal negro y tupido se agazapo en la oscuridad tratando de esconderse de mi.
Si me siguen podrán derrotar a cientos de personas como ese guerrero mencioné cambiando mi tonó de voz a mi tonó habitual, frío y calcular, dejando de lado todo aquel costado de calidez, no servía con ellos Mago Negro, te sigo viendo aunque te camufles con la oscuridad mencioné mientras que la oscuridad que lo protegía se volvía sólida como para tocar el pelaje de su espalda Veo futuro en ustedes. Podréis hacer grandes cosas, pero os falta mucho camino, siganme y os enseñare la dirección correcta mencioné mientras comenzaba a surgir una única forma, hecho de sombras en el centro de aquel lugar.

El tono de voz cambio rápido de uno burlón a uno frío y calculador, como si cada palabra estuviera premeditada, pensada y se escogió con delicadeza.
-No me agrado esas frases antiguas, pero si el seguirte me permite exterminar a bastardos como el de hace poco. Lo haré.- dije mientras llevaba uno de mis brazos a mi rodilla derecha para después utilizarla para después erguirme y mirar fijamente aquella sombra que se alzaba en el centro del campo -Mi nombre es... Diablos, hace tanto que no lo digo... Ban, pero me llaman The Clown por este make-up que utilizo desde que asesine al primer cerdo, aquel que se creyó mejor que alguien y me azotó con fiereza, su sangre fue mi primer maquillaje.- mencioné para presentarme ante aquel ser que decía convencido poder hacerme más fuerte y, si llegara a fallar, podría tomar su vida si estoy más cerca.

Me agazapé a la Oscuridad, sin embargo, sentí algo material en mi espalda, seguido con una afirmación de aquella sombra que se había formado. EN reacción instintiva y furiosa, tomé la muramasa y giré sobre mi mismo para en un corte preciso, dañar aquello que estuviese detrás de mi y gruñí, furioso, mostrando mis colmillos y mis ojos rojos reluciendo en la Oscuridad.

-Mago Negro, te sigo viendo aunque te camufles con la oscuridad.- dijo aquella extraña esencia. Olfateé el aire y me dí cuenta de la ausencia de olor ajeno al de rostro blanco y al gato. Era absolutamente magia de ilusión. Me enfoqué para poder visualizar, pero noté que mis ojos, que en el pasado me habrían enseñado a atravesar las ilusiones y engaños, no funcionaba en éste momento; muy probablemente por el cambio de energías entre universos. Chasqueé los colmillos y escuché la frase siguiente del interlocutor.

-Veo futuro en ustedes. Podréis hacer grandes cosas, pero os falta mucho camino, siganme y os enseñare la dirección correcta


-¿Quién sos vos para decirme qué es correcto y qué es erróneo? ¿Cómo confiar en alguien tan cobarde como para ocultar su rostro en las Tinieblas? -gruñí amenazadoramente, mi pelaje esponjándose en respuesta. Por alguna razón mi instinto me dictaba no atacar por ahora y me detuviera a observar, más porque atacar una ilusión, podría sólo agotarme más, pero mantuve mi muramasa en alto, aún más, al notar que una figura se formó en el centro del lugar. Con mi agudizado olfato, inhalé profundo, en busca de detectar esencias nuevas en las cercanías.

Sin embargo, el de cara blanca, rompió el silencio con la siguiente afirmación:

-No me agrado esas frases antiguas, pero si el seguirte me permite exterminar a bastardos como el de hace poco. Lo haré.- dijo mientras llevaba uno de sus brazos a su rodilla derecha para después utilizarla para después erguirse.- Mi nombre es... Diablos, hace tanto que no lo digo... Ban, pero me llaman The Clown por este make-up que utilizo desde que asesine al primer cerdo, aquel que se creyó mejor que alguien y me azotó con fiereza, su sangre fue mi primer maquillaje.

Me sorprendió, y me dí cuenta de la verdadera naturaleza del de cara blanca -nombrado Ban-. Un asesino que asesina a otros. Un mal recuerdo se enroscó en la boca de mi abdomen, no era tan diferente... Sin embargo, había cambiado... O eso esperaba.

Me volví a enfocar en mis dos nuevos probables enemigos. Algo me llamaba la atención. Tenía que preguntarlo.

-He escuchado que los manipuladores de la fuerza elemental se reúnen en gremios, dejadme observar tu marca humano de las sombras. SI mi instinto habla bien, y nunca me ha fallado, sé que responder a vuestra petición.

Gruñí de nuevo, sabía que no ganaba nada gruñendo, quería actuar, pero la cautela siempre ha sido mi fuerte por mi naturaleza vulpina. Mis sospechas eran altas y apostaba a que ése ser estaba relacionado con el ojos virolos, el cabello raro y hombre-arenero.

Y si ésa era su respuesta...

No dejaría que viviera para advertirles...

No ésta vez...

El escuchar las palabras de aquel demacrado mago, que se hizo llamar Ban The Clown, una sonrisa se dibujo en mi rostro. Era justo lo que había calculado, una aceptación a medias, una sumisión incompleta.
-Elige el lugar donde quieras tu marca.- dije mientras aquella figura extendía el brazo derecho para que se formara, con las propias sombras y oscuridad acumuladas en aquel lugar, el símbolo que nos caracterizaba a los Dark Riders, de un tamaño importante como que se viera a 100 metros -¿Acaso no lo puedes ver que me exiges que te lo muestre?- dije de modo despectivo sobre las exigencias de aquel ser de pelaje oscuro -Se ve que solamente tienes la apariencia de un carnívoro.- mencioné mientras abandonaba las sombras de la figura y caminaba de forma calmada hacia él -Estar en las sombras o atacar desde ellas no es de cobarde. Sino todo lo contrario. Alguien que pretende cazar a su presa de manera segura, lo observa, evalúa sus hábitos y cuando lo ve propicio, ataca a su presa.- explique cuando me pare a menos de dos metros de él -¿Me quieres atacar con esa espada? Hazlo, pero déjame advertirte de algo, no jugaré contigo como lo hizo aquel hombre de armadura dorada.- concluí al darle la espalda para dirigirme hacia The Clown -Ahora eres de mi familia. Juntos haremos cosas enormes y, como recompensa por seguirme, te haré más fuerte.- afirmé cuando la marca se plasmaba en su piel.

El humano salió de sus sombras y lo observé con odio retenido, me estaba costando trabajo controlar mi Ira, sin embargo, sus palabras me hicieron hilariosas, lo cual no contuve en lo más mínimo, y mi voz, enronquecida y grave, hizo eco en todo el sitio, retumbando como si mil canes gruñeran y se burlaran. EL humano estaba confiado en su poder, y lo podía oler. Admitía que mi poder actual no podría rivalizar el de éste sujeto, sin embargo, yo conocía magia que él jamás podría alcanzar…. Magia de Dragones…

Aunque no pudiera usar ése poder aún, lo sentía arder en mi corazón. Lo observé con odio, algo aliviado que aquél humano no perteneciera a los que se autodenominaban “Sol Oscuro”. El humano Ban se les había unido y el gato no había respondido nada, posiblemente en estado de choque emocional

-¡Hablas de la Oscuridad con una enorme boca, ni siquiera sabes qué es y se nota en tus ojos y en tu olor! –me bufé, sin dejar de observarlo.- Se hacen llamar gremios oscuros, pero ni tú ni los del otro del solecito negro saben que representa ser un manipulador de la Oscuridad. La usan como mera arma, no como es.

Luego me dirigí al humano de cara pintada y le observé seriamente, sus ojos delataban a mi parecer un odio profundo, lo llegué a notar durante nuestra pelea y por sus palabras. Esa intensidad la había visto antes, no podía de dejar de sentirme conmovido y preocupado, aunque fuese un humano.

-Ban, no puedo decir que entiendo tu dolor, sin embargo, te sugiero que andes con cuidado. – mi voz se hizo serena y tranquila.- La oscuridad puede consumir gravemente si no se sabe controlar, noto en tú esencia mucho odio, tienes sed de venganza y poder. Pero poder por solo obtenerlo, se vuelve en algo que te puede dañar. ¿Tlein ijtoa moyoltsij? ¡Nitlakakili! Dice en un idioma antiguo, ¿qué dice tu corazón? ¡escúchalo! Me gustaría vinieras conmigo, pero, es tu decisión. Buscame en los bosques allí estaré.

Al final suspiré y me dirigí hacia donde el gigante de armadura dorada había aparecido, algo había dicho de una joya, podría ser que pudiera encontrar las respuestas si buscaba a ese humano, aparte de a Ryuu. Pasé entra el humano de sombras y cuando cruzamos caminos, le dije en una voz que sólo él podía escuchar.

-¡Tienes miedo a la Oscuridad, la huelo! Cuando nos volvamos a ver, te mostraré lo que es ser un Elementista Oscuro. ¡Niya tlajtli! –seguí caminando sin detenerme y pasé junto al gato, le toqué su hombro, en señal de animarlo para seguirme, sin embargo, él tendría que tomar una decisión también.

No me detuve, sentía odio por no poder triturarlos, pero si lo hacía…

¡Primero debía estar seguro de qué es lo que pasaba!

Y la respuesta pudiera estar al fondo de ésta habitación… Así que proseguí..

El felino observó cómo una sombra se materializaba cerca de ellos. No dijo nada, sólo escuchó en silencio. Por un lado, Liger escuchaba a la sombra y sus promesas de poder, pero Zakh se mantenía ocupado con algo más: había algo con ese caballero dorado que no terminaba de cuadrar, algo que hizo... O dijo.

Cuando el lobo se acerco hacia el exceed y los humanos, y después de ser descubierto, Zakh tomó la última esfera curativa que poseía, y la destrozó contra el suelo, en un punto que se encontraba justo en medio de los tres.

El payaso, que se presentó como Ban o The Clown, decidió aliarse con el tipo de las sombras. Por su lado, el zorro se negó y realizó un pequeño discurso sobre la Oscuridad y cosas así. Parecía decepcionado por la elección de Ban, y molesto con el otro tipo.

El zorro comenzó a marcharse, y al pasar junto al gato le palmeó en el hombro, tal vez esperando que se uniera a él. Pero fue ignorado, ya que Zakh seguía pensando. No fue algo que hiciera el caballero lo que le molestaba, sino algo que dijo. Habló sobre una joya.

-Si habló de una joya y había tanta protección aquí, definitivamente esa joya está en el edificio del que salió el Caballero. Y no me vendría nada mal algo de dinero pra la tienda de armas.- Después de razonar eso, levantó vuelo rumbo a dicho edificio, para quedarse con la joya.

Mientras se iba, gritó unas cuantas palabras a Ban y al tipo de las sombras:
-Eh, esperen un poco, ya regreso. Y vos, el de las sombras... Andá preparando una marca... Pero no te creas que vas a poder usarme... Porque en realidad, yo te voy a usar a vos para volverme más poderoso, sólo vas a ser una herramienta mía, ¿entendido?-

Off Rol:
Buena jugada Zakh, descubriste a que me refería con no ser mezquinos.
Vida de The Clown: 100
Vida de Anmorph Crystol: 100
Vida de Zakh: 100
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On Rol:
El sol comenzó a perder su podería sobre el firmamento a medida que se desplazaba sobre este, para ir haciendo suya, aquella parte Oeste del cielo.
De repente, un gran sónido hizo eco por toda la región y, a continuación, unas cuantas luces comenzaron a emerger desde la dirección de Era. Las mismas surcaban el cielo en diferentes dirección. Unas cuantas de ellas pasaron por encima de ellos pero ninguna se detuvo.
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Off Rol:
Master tendría que conocer que son estas "luces".
Son pedidos de alerta/captura de aquellos que se oponen a la monarquía de Fiore y/o al Concejo Mágico (o Ejercito de la Runa)

(Off-rol: Gato, yo también voy hacia al joya)

Mirando a aquel sujeto, me levanté la remera y señale al costado de mi recto abdominal.
-Aquí- dije mientras tocaba la zona.
La marca del gremio era la cabeza de un lobo la cual, se formo de sombras y después se plasmo en mi piel.
Luego, el felino rompio algo contra el suelo y mis heridas se curaron. Aquellos cortes, dolores e incluso la fatiga desapareció y luego dijo que usaría al hombre sombras, quien se me acerco y me dijo que ahora era de su familia y que me protegería.
-Si cumples con tu palabra de acerme más fuerte no tendrás que preocuparte por mi.- le dije antes de voltearme para ver al zorro que se estaba alejando -La venganza no lo sera todo. Pero jamas seré vencida por ella.- respondí soberbiamente mientras veía que el gato se adelantaba para tomar la joya que aquel guerrero cuidaba celosamente, en eso, un ruido se dejo escuchar y varias luces comenzaron a volar en diferentes direcciones -¿Pero qué demonios es eso?- pregunté sin darle importancia al hecho de parecer ignorante en la materia.

La marca se realizo en el costado de la cintura de aquel mago y poco después, el de pelaje negro me quiso provocar con palabras vacias provenientes de la ignorancia. ¿Qué yo le temía a las sombras? ¿Qué él me demostraría lo que es un mago oscuro?
-Ja. El que huele extraño aquí eres tu. ¿No eres de aquí cierto? No, claro que no. Tu, al igual que el exceed no tienen impregnados en si la esencia de este planeta, de esta dimensión. Ustedes huelen a forasteros...- explique mientras el símbolo que se uso para otorgarle la marca a The Clown volvía a mi mano, deje que una sonrisa se marcara claramente en mi rostro -¿Dices que hueles el miedo a la oscuridad proveniendo de mi? Déjame decirte que te equivocas... YO SOY LA OSCURIDAD.- le grite mientras ondas de energía oscura y sombras salian despedidas en todas las direcciones y una fuerte presión mágica se dejaba sentir, lo que dificultaría la respiración de aquellos allí presentes -ESE MIEDO QUE SIENTES PROVIENE DE MI... PROVIENE DE VOS.- concluí antes de que el estruendo provocado por mi voz en las cercanías se viera apagado por otro mayor que venía desde la ciudad de Era -Habréis causado una linda impresión... Ya sois buscados por el ejercito de la runa y por aquellos magos "legales" que quieran algunos jewells más.- mencioné mientras mi voz se volvía a escuchar calmada y, la presión mágica y las ondas oscuras se disipaban en la atmosfera.

Mientras avanzaba rápidamente hacia dónde le tipo dorado había salido, escuche en la lejanía un poder oscuro poderoso, una ola de sensaciones destructivas. Mi reacción era obvia, ESO NO ERA NADA, en comparación a las olas oscuras que podía yo generar, así que no le tomé caso y simplemente dejé que mi carcajada más estruendosa se hiciera resonar en el lugar.  En ése momento, noté en los cielos varias luces que provenían del oeste, y de otros sitios. No me detuve a preguntar, simplemente avancé aún más rápido mientras algunas de esas luces surcaban por encima de nosotros. Procuré usar la Oscuridad para camuflajearme y avanzar hasta que llegué al sitio donde el tipo de armadura dorada había aparecido, empujando las puertas  y entrando velozmente. A lo lejos noté que el gato volaba en ésta dirección rápidamente, por lo que dejé entreabierta la puerta y observé el sitio, olfateando para distinguir algo fuera de lo usual o, al menos, descubrir algo que le perteneciera al tipo de la armadura.
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Off-rol:
Acciones: Observación detallada del cuarto del jefe y olfateo canino.
Espero resolución de Narrador.

Off Rol:
Por más que en vuestro mundo seais poderosos (tanto Anmorph como Zakh (ya que Zakh era perseguido por los humanos y los propios exceed, por ende, debería ser como una especie de eminencia allí) aquí, no lo son. Así que por favor, si alguien de rango mayor dice hacer un poder o liberar energía, les guste o no, tienen que rolear que se sienten abrumados, por lo que, haré con todos lo que les pasaría.
Rangos y Beneficios
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On Rol:
La oscuridad emanó sin límites desde el cuerpo de Reyns, haciendo que una gigantesca sombra cubriera todo el área.
The Clown, el que se encontraba más cerca, cayo súbitamente en el suelo y comenzó a sentir como la respiración se le imposibilitaba a tal grado de comenzar a sentir principios de asfixia.
Anmorph, aquel que se había retirado orgulloso, tratando de humillar al recién llegado, por más que se encontraba lejos, cayo de rodillas sintiendo como un frío recorría su espalda y como se le agitaba la respiración por la aparente falta de oxigeno y Zakh, el gato que se encontraba volando a toda velocidad, cayo encima de Anmorph por la misma razón que sus antiguos compañeros de batalla.